San Maximiliano María Kolbe nació en Polonia el 8 de enero de 1894. Su nombre significa «El más importante de la familia». Fue un sacerdote católico y fundador de la Milicia de la Inmaculada, una organización que promovía la devoción a la Virgen María.

Durante la Segunda Guerra Mundial, fue arrestado por los nazis y llevado al campo de concentración de Auschwitz. Allí, ofreció su vida para salvar a un padre de familia, quien había sido condenado a muerte por intentar escapar. Los soldados alemanes aceptaron su oferta y lo condenaron a muerte mediante un ayuno de dos semanas.

Sin embargo, San Maximiliano resistió a pesar de las difíciles condiciones y la falta de alimento. Finalmente, los soldados alemanes lo fusilaron el 14 de agosto de 1941, convirtiéndolo en uno de los mártires modernos.